Pastillas y Píldoras en Peligro de Extinción

Si hacemos una encuesta con estas dos preguntas:

1.- ¿Conoce algún medicamento en pastillas?

2.- ¿Conoce algunas píldoras?

3.- Nombre algún ejemplo

Estoy seguro que la inmensa mayoría de los encuestados contestarían “si”, y al poner ejemplos afloraría la confusión existente sobre el tema.

¿Cuántas veces hemos pedido paracetamol en pastillas, la pastilla de la tensión, la píldora anticonceptiva…?. Pues, para sorpresa de muchos, os diré que actualmente no hay comercializada en España ningún paracetamol en pastillas, ninguna pastilla para la tensión y ninguna píldora anticonceptiva (desde un punto de vista estrictamente farmacéutico).

¿En qué se parece un lince ibérico a una pastilla?. ¿Y un rinoceronte de Java a una píldora?

¡En efecto!, siento daros una noticia así, pero lo cierto es que las pastillas y las píldoras están en peligro de extinción. No sería de extrañar que en unos años, las dejemos de ver correr por los cajones de las farmacias y por los botiquines de nuestras casas. Como hemos dejado de ver por estos lares los sellos o cápsulas amiláceas, que seguro que vuestros abuelos han utilizado en más de una ocasión, y que se extinguieron hace años.

La realidad es que hoy en día son muy pocos los medicamentos en forma de pastillas o píldoras que hay comercializados.

Vamos por partes:

Las pastillas y las píldoras, al igual que los comprimidos, cápsulas, grageas, supositorios, jarabes, granulados, etc. son formas farmacéuticas.

La forma farmacéutica es la disposición individualizada a que se adaptan los fármacos y excipientes para constituir un medicamento. Es decir, la disposición externa que se da a las sustancias medicamentosas para facilitar su administración.

Por ejemplo, para esquematizarlo de forma sencilla, en el caso de unos comprimidos de paracetamol:

  • Paracetamol es el fármaco
  • Almidón, estearato magnésico… son los excipientes
  • Comprimido es la forma farmacéutica

Hay formas farmacéuticas que se utilizan mucho actualmente como los comprimidos, que su característica principal es que se obtienen por compresión de polvos. Y formas farmacéuticas que prácticamente no se utilizan como las píldoras, realizadas con una masa resultante de mezclar componentes sólidos y líquidos, a la que se da forma más o menos esférica y las pastillas (duras y blandas) que están preparadas por moldeo.

Para entendernos: las pastillas son parecidas a caramelos, un ejemplo serían las Juanolas® o el Strepsils®. Las píldoras son como “pelotillas de miga de pan”, como por ejemplo Zeninas®.

Como curiosidad comentaros que el nombre de pastilla deriva de pasta y el de píldora del latín pilula (pelotilla)

Conclusión: Existe gran confusión con respecto a las distintas formas farmacéuticas, derivada de una terminología coloquial ampliamente difundida. A pesar de ello, no os preocupéis. Aunque esté bien saberlo por curiosidad o culturilla general, si seguís pidiendo las pastillas para la tensión o la píldora del día después nos vamos a entender perfectamente.

Bibliografía Real Farmacopea Española